Wittney de México

En la actualidad, el sueño del doctor Martínez de fabricar los mejores productos médicos veterinarios en nuestro país es una realidad gracias a su gran esfuerzo y confianza en México, que continúa ahora una nueva generación con el mismo entusiasmo. Wittney de México tiene hoy una muy importante producción de antibióticos, vitamínicos, hormonales, vermífugos, minerales, antidiarreicos y antisépticos de excelente calidad que cuentan con la aceptación y confianza del sector ganadero.

Visión

Una empresa que contribuya con el desarrollo de la medicina veterinaria y de la propia industria en los mercados internacionales, mediante tecnología de punta, estrictas normas de calidad, investigación y desarrollo y sobre todo basados en una gran responsabilidad con nuestros clientes y con el medio ambiente.

Misión

Ser una empresa líder en la fabricación y distribución de productos veterinarios de alta calidad en toda América Latina, para contribuir con la salud, la medicina y el desarrollo de la industria.

Nuestra historia

En 1960 el Dr. Martínez Ferrer, médico veterinario zootecnista con gran espíritu de empresario, fundó el Almacén del Ganadero, farmacia veterinaria que distribuía los productos médicos veterinarios Franklin procedentes de los Estados Unidos en exclusiva en la República Mexicana.

En 1968, con el surgimiento de algunas restricciones para la importación de este tipo de productos, el Dr. Martínez decidió iniciar un laboratorio que fabricara en nuestro país los productos que antes importaba, aprovechando la infraestructura que ya tenía del Almacén del ganadero y con la plena confianza de que en México se podrían elaborar también productos de la mejor calidad.  Su iniciativa tuvo una buena aceptación entre los ganaderos, principalmente del Estado de Chihuahua, que sabían de la capacidad y honestidad de nuestro fundador.

Sin embargo, hacer realidad ese sueño fue una tarea complicada, ya que el laboratorio norteamericano se negó a que sus productos se fabricaran en México.  El reto entonces fue mayor, había que conseguir un nuevo socio acreditado en el ramo dispuesto a que sus productos se fabricaran también en México.

Poco después, el Dr. Martínez contactó a los hermanos De Yohanna, dueños del laboratorio Witney Serum Company en Denver, Colorado, Estados Unidos; a quienes el proyecto de fabricación en nuestro país, bajo su supervisión les pareció una excelente idea.

En un principio, llevaron a cabo una sociedad por las primeras fórmulas durante siete años y al término de ese tiempo, las fórmulas pasaron automáticamente a la propiedad del Dr. Martínez, y se incorporaron así a Wittney de México.

La transición de distribuidor a fabricante requirió un muy importante esfuerzo primeramente se comenzó construyendo una parte del laboratorio donde se empezó a producir en pequeña escala, bajo la asesoría del Dr. Arnold J. Henning, químico especialista de la Universidad de Boulder, Colorado.